martes, 26 de noviembre de 2019

LAS RONDALLAS DE LA ZONA Y SU EPOCA DE ALCALDE




  En las década de los 60 proliferaron mucho las rondalla por los distintos pueblos de la comarca, muchas de ellas por no disponer de un cantador con renombre venían a contratar a Vicente para sus actuaciones, mi padre siempre que podía les acompañaba, actuó con las siguientes rondallas:
  San Lorenzo de Hueca, la de Selgua , Almunia de San Juan, Pueyo de Santa Cruz, Castejon del Puente, Alma Literana de Tamarite de Litera, Barbastro, Aires Monegrinos de Sariñena y la Virgen de la Alegria de Monzon,  no sé si me olvido de alguna, tal vez la de Binefar o Fraga pero no estoy seguro si actuó con ellos, sí fue como jurado en mas de un certamen de jota que hicieron.



   
  La foto superior desconozco que rondalla es, la del centro es la de La Almunia de San Juan y la inferior es la rondalla de Barbastro en un homenaje que le hicieron en Calatayud a mi padre. Esta rondalla lamentablemente hace unos años termino su andadura parcialmente ya que el profesor de baile Salvador Fierro aún sigue formando a una gran cantidad de alumnos.



  Las dos siguientes son la Virgen de la Alegria de Monzon y Aires Monegrinos de Sariñena.

  De las demás rondallas no tengo fotos, si algún día consigo alguna ya las agregaré en esta página.
 

  Mi padre seguía haciendo cada vez mas rondas, también  lo llamaban para los quintos,en fin que mi madre se pasaba todo el verano preparando maletas.
   A mi padre lo que mas le preocupaba era : que al jubilarse algunos de los joteros rondadores de entonces, no salieran nuevos valores.
  Un día se le presentó un aficionado a la jota de ronda de Pozan de Vero, para ver  si quería enseñarle a cantar jotas, mi padre no dudó en decirle que si, pero que como no tenia tiempo le dijo que le enseñaría en el campo trabajando, a lo cual el de Pozan no dudo en venirse para Morilla, donde comenzó a aprender los diferentes estilos que Vicente le enseñaba y que el a su vez  había aprendido tanto en Huesca como en Zaragoza, ese cantador no era otro que Joaquín Campodarve.
  Después de varios meses mi padre le aconsejó que se fuera a Huesca con  Camila Gracia para seguir perfeccionándose.
  Joaquín no tardaría mucho en hacerse famoso, tenía muy buena voz, ganando entre otros premios el 1º en un certamen oficial de Huesca, pero al igual que a mi padre además de actuar con rondallas, lo de ir por los pueblos a rondar era lo que más le entusiasmaba, ya que era uno de los mejores rondadores a la hora de improvisar y también incluía otras facetas como eran esas charradas, que a todos nos hacían reír y estaban muy bien.
  A las rondas donde no podía acudir el uno iba el otro, más tarde cuando mi padre se hizo mayor, se unieron actuando juntos en la mayoría de los pueblos, sobre todo en los más grandes.
  En su retirada el pueblo de Pozan de Vero le organizó un gran homenaje, en el que entre otros cantadores fue mi padre que acudía a todos los homenajes  que lo solicitaban.


  Hay que reconocer el gran trabajo y sacrificio que supone, el mantener viva una rondalla, igual para cada uno de sus componentes, ya sean bailadores, instrumentistas, cantadores, cantadoras u organizadores ya que la recompensa real son los aplausos del publico, y el propio orgullo de pertenecer a una rondalla, a no ser como mi padre que de alguna manera se dedicó profesionalmente.
  Todas aquellas rondallas de los pueblos más pequeños, con el tiempo fueron desapareciendo,
  Una de esas rondallas era la de Selgua, que por ser la mas próxima a mi pueblo, era la que me iba a incorporar yo con una guitarra que me había comprado mi padre, porque para mi eso de cantar lo veía un poco complicado.(Total que al disolverse, me quedé como se dice vulgarmente, compuesto y sin novia).


  Al final de los 50 y principio de los 60 fue alcalde pedáneo de su pueblo Morilla, porque el ayuntamiento se encontraba en Ilche, durante ese tiempo trabajó mucho para conseguir mejoras para su pueblo, la más importante que acometió fue: el abastecimiento del agua potable y alcantarillado.
  Lo que más recuerdo de esa obra, era el gran ruido que hacían los compresores con sus martillos  cuando nos encontrábamos en la escuela, era ensordecedor, y también algún que otro madero volando por los tejados, ya que todo el pueblo esta construido sobre una gran losa de piedra, por lo que en ocasiones utilizaban barrenos para hacer las zanjas.
  A mi padre lo que más le preocupaba era lo de los dineros, porque aunque consiguió una subvención de la D.P de Huesca de 380.000 pesetas, le faltaban para pagar la obra 78.599 pesetas, de las que se tenia que hacer cargo el pueblo de Morilla, y naturalmente había familias con muy pocos recursos, creo que al final lo hicieron por metros de fachada, como así me lo confirmo el vecino y gran amigo de mi padre  Ramón.
  En muy pocos pueblos pequeños como este, habían acometido una obra tan importante como esta.
  En todo el proceso le ayudo una persona con un alto cargo en la Diputación Provincial, el cual tenia una gran relaciòn con mi padre.

  En el diario Nueva España salió publicado con fecha 12 de febrero de 1962  y curiosamente el diario Alto Aragón ha publicado esta página al cumplirse el 50 aniversario.







   La fuente de la que se abastecía el pueblo, se encuentra en las faldas de la cantera que va desde Berbegal asta más allá de Monte Odina y Terreu, que son dos de las torres o fincas mas importantes lindando ya con los Monegros, también pertenecen al Ayuntamiento de Ilche. La fuente se podría denominar como un pozo fuente, ya que se desciende en vertical unos 3 o 4 metros, con una anchura aproximada de metro y medio por lado, no lo recuerdo muy bien, después se accedía a un recinto abovedado que hacía las veces de arqueta, de unos dos metros de altura por dos de ancho, todo hecho con piedras picadas. De esa arqueta partía un túnel en curva de unos 5 o 6  metros, donde tenias que ir agachado y con linterna ya que había muy poca visibilidad. Al final del túnel se encontraba una rendija en forma de triangulo en la piedra viva, de donde brotaba el agua que a su vez era recogida por un pequeño canal, y conducido a la arqueta mas grande, de allí salia medio metro más profunda la tubería para el pueblo. Cabe destacar el perfecto estado de conservación, increíble con los años que debe tener, creo que soy de las pocas personas que han visto de donde brotaba el agua, ya que hubo un problema  al mermar el caudal cuando nunca había sucedido, el problema estaba en la tubería que tenia una burbuja de aire, ya que desciende por su propio peso unos dos kilómetros para llegar al pueblo.
  Estas fuentes eran aprovechadas al máximo en todos los pueblos del somontano, dada la escasez de agua en muchos de ellos, primero se utilizaba para uso domestico, después el abrevadero para los animales y al lado los lavaderos, luego la que sobraba la recogían en una balsa para regar con cubos o pozales los pequeños huertos mas cercanos.





  Estos son los últimos restos de los lavadores.

  Al poner el agua en las casas todo esto quedó obsoleto, ya solo se utilizaba para regar los pequeños huertos, hasta que llego el canal de Terreu.
  La balsa se convirtió en piscina, y sus alrededores en una pista deportiva y un parque donde se encuentra uno muy agusto a la sombra de los arboles o refrescándose en la piscina.


 En la torre de Odina donde trabajaba los veranos cuando estudiaba, se encontraba una biblioteca que a mi personalmente me llamaba mucho la atención. Como podía haber en medio del monte una biblioteca tan impresionante como aquella,? posteriormente me entere que había sido Ramón J Sender el encargado de montarla, el cual escribió un libro titulado Monte Odina, a raíz de su estancia por estas tierras.
  En Terreu había un cónsul creo muy importante, porque antiguamente el tren que venia de Monzón dirección Zaragoza Madrid tenia un apeadero para recogerlo.


  En la cantera de mi pueblo también se encuentran las ruinas del castillo o fortaleza llamado Gramapan, y donde subíamos en muchas ocasiones de excursión, ya que hay una vista impresionante de todo el valle Alferche, el Bajo Cinca, gran parte del Somontano y muchas cumbres del pirineo.








  En esta ultima foto se ve el canal de Terreu en las faldas de la cantera en el centro mi pueblo Morilla
y parte del Valle Alferche con el castillo de Monzón al fondo pero en la foto no se puede apreciar.

  Otra de las obras que realizo fue cambiar el alumbrado público que era muy deficiente.

  Para las fiestas del pueblo que son el 30 de Noviembre ( San Andrés Apóstol ) el alcalde también tenia un papel relevante, aun recuerdo que unos días antes los mozos que eran los encargados de organizar la fiesta,  pagar las actuaciones de la orquesta y el cantador para la ronda, venían a mi casa siendo yo un crió a pedirle la fiesta al alcalde, para que este les diera autorización, como ya era después de la cena y entre algún vaso de vino que otro y alguna galleta se armaba un jolgorio allí que no me dejaban pegar ojo asta las 2 de la madrugada, o mas por que luego seguía el follón por la calle.
  También era el alcalde el que el día del patrón tenia que recibir y dar de comer a las autoridades presentes, como guardias civiles, curas y algún músico que repartían por las casas, aunque en este caso realmente la protagonista era mi madre, que la pobre se pasaba todo el día en la cocina guisando los mejores pollos del corral y demás manjares, recuerdo un año que vinieron 4 guardias civiles, 3 o 4 curas, músicos, familiares y demás, vamos que estaba el comedor al completo y la sobremesa no sé cuanto duro por que uno de los curas tocaba el acordeón y mi padre cantaba, bueno al final allí terminaron cantando todos jotas, pasodobles y demás, vaya juerga que montaron, mi madre no, que estaba fregando claro.

  Para nosotros que entonces eramos unos críos la fiesta y la romería al Pueyo eran los dos grandes acontecimientos del año. La fiesta comenzaba la víspera cuando llegaban los músicos lo primero que hacían era hacer un pasacalles luego los repartían por las casas de los mozos para comer y dormir ya que solía ser la misma orquesta para los dos o tres días que duraba la fiesta, también venia un turronero que nos vendía chucherías para los críos y otro señor con una escopeta de perdigón para hacer puntería pero casi no lo recuerdo.
  El día mas importante lógicamente era el día del patrón el cual antes de la misa se llevaba en una peana de procesión por el pueblo (bueno y se sigue manteniendo esta tradición) al terminar la misa el cantador dedica unas jotas a las autoridades y demás, para seguidamente comenzar la ronda que es acompañada por la gran mayoría de la gente de su pueblo, invitando en todas las casa con el mejor vino y demás manjares.
  Vicente nunca hizo la ronda de su pueblo aunque siempre solía cantar en la salida de misa ya que todos los vecinos se lo pedían.